Diez hospitales españoles comenzarán a utilizar el marcapasos sin cables más pequeño del mundo que se aprobado recientemente en Europa. Este dispositivo reduce el riesgo de infecciones y elimina complicaciones asociadas a los cables, marcando así un importante avance en cardiología.
Al presentar un tamaño tan pequeño (de una décima parte del marcapasos tradicional), se implanta directamente en el corazón mediante un catéter, sin incisiones ni electrodos. Un estudio publicado en el European Heart Journal mostró un 100 % de éxito en los primeros 140 pacientes, con la participación del Hospital Clínic de Barcelona.
Está recomendado para pacientes mayores, jóvenes sin necesidad de estimulación auricular o con infecciones previas. Según el Dr. González-Juanatey, podría revolucionar la estimulación cardíaca y sustituir en el futuro a los marcapasos tradicionales.











